Ñoquis con setas (Gnocchi ai funghi)

lunes, 30 de marzo de 2015

En casa somos amantes de la pasta, nos encanta de cualquier manera y es tan socorrida y versátil que nos gusta  probar nuevas recetas. Nunca había comido ñoquis hasta que fui por primera vez a Italia (fue en Verona), precisamente con setas, como en la receta de hoy. Para quien no lo sepa los ñoquis son un tipo de pasta típica de Italia ( en italiano se llaman gnocchis) y los más conocidos son los de patata. Un día los ví día en el supermercado y me vino ese plato tan rico que comimos allí, así que me dio por comprarlos y desde entonces los hacemos muy a menudo. Son muy fáciles de preparar (de hecho es una receta que tengo pendiente). Los suelo comprar en el Lidl que están buenísimos y tienen un precio estupendo.

En esta ocasión los he preparado con setas, receta cosecha propia y fueron un éxito. Las setas que he usado son unas que venden congeladas de la marca Día, dan un sabor buenísimo y siempre las tengo en el congelador. También venden unas similares en el Lidl. Voy a tener que empezar a cobrar comisión de tanto hacer propaganda a los supermercados :-)



Nos ponemos delantales y a ¡cocinar!

Ingredientes ( para dos personas)

500gr de ñoquis
3 puñados generosos de setas congeladas
1 diente de ajo
1 cucharada sopera de mantequilla
Pimienta negra
Nata líquida para cocinar
Queso parmesano

Preparación

En una sartén derretimos la mantequilla y doramos el ajo, añadimos las setas y dejamos que se vayan haciendo a fuego medio. Salamos.

Una vez que están listas las setas las reservamos.

Cocemos nuestros ñoquis. Para ello se pone una olla al fuego con abundante agua salada y cuando empiece a hervir añadimos los ñoquis. En un minuto más o menos los ñoquis empiezan a flotar y tenemos que ir sacándolos con una espumadera.

Salteamos los ñoquis con las setas que teníamos reservadas, le añadimos un chorro de nata, pimienta negra y queso parmesano al gusto. Mezclamos bien y dejamos unos minutos para que se integren bien los sabores.Rectificamos de sal si fuera necesario.

Y ya tenemos listos nuestro delicioso plato de pasta.


Espero que os guste.

La ciudad de Verona

Mousse rápida de limón

martes, 24 de marzo de 2015

Ayer salí de cuentas y la pequeña  Daniela se resiste a salir, debe ser que nos ha salido tímida, así que tendremos que atajar la dulce espera con deliciosos placeres como el que os traigo hoy, una mousse rápida de limón, una de esas recetas que se preparan en un periquete y en una versión más light ( con leche evaporada en lugar de llevar leche condensada) . Es una receta de las de toda la vida, pero por si acaso no la conocéis os la muestro.


Nos ponemos delantales y ¡ a cocinar!

Ingredientes

200 ml de leche evaporada.
100g de azúcar.
Zumo de dos limones.

Preparación

En primer lugar exprimimos los dos limones y colamos el zumo para eliminar la pulpa y las pepitas.

La leche evaporada ha de estar muy fría mejor meterla en la nevera el día anterior.Yo meto también el bol y las varillas que uso para montar una hora antes.

Montamos la leche evaporada en un bol hasta que empiece a coger consistencia, añadimos poco a poco el zumo de limón sin dejar de batir.

Añadimos el azúcar en forma de lluvia y sin dejar de batir.

Distribuimos en vasitos y refrigeramos antes de servir.

Espero que os guste.


Fuente: https://ww1.nestle.es/cocina/home.aspx

Bizcocho glaseado de limón

lunes, 23 de marzo de 2015

Empezamos la semana con un bizcocho ideal para el desayuno o la merienda que no dejará indiferente a nadie. Además, como veís, queda hasta bonito :p



Ingredientes

Para el bizcocho:
3 huevos.
1 yogurt natural.
3 medidas de yogurt de harina.
2 medidas de yogurt de azúcar.
1 medida de yogurt de aceite de oliva suave
1 sobre de levadura (16 g de polvo para hornear).
Ralladura de un limón
Harina y mantequilla para engrasar la cubeta.
Opcional: limón confitado, nueces y coco rallado para decorar. El limón confitado viene en unas tarrinas pequeñas que compro en el lidl cortado en cuadraditos.

Para el glaseado:
150g de azúcar glass.
El zumo de uno o dos limones.

Preparación

Batimos los huevos con el azúcar hasta que estén bien ligados.

Añadimos el yogur y el aceite y seguimos batiendo. Lavamos bien el limón y con un rallador, rallamos la cáscara y la añadimos.

Tamizamos la levadura y la harina sobre la masa y batimos bien.

Pasamos un puñado de nueces y de trocitos de limón confitado por harina para que no se vayan al fondo del bizcocho cuando lo horneemos. Se las añadimos a la masa y mezclamos con ayuda de una espátula con movimientos envolventes.

Untamos la cubeta con mantequilla, espolvoreamos con harina y vertimos dentro la masa.

Modo horno:
Debemos tener el horno precalentado. Pondremos a 180 ºC calor arriba y abajo. Tiene que estar 35-40 minutos, hasta que el pincho salga limpio.

Modo chefomatic:
Programamos el modo horno durante 50 minutos ( hasta que el pincho salga limpio ). Le damos la vuelta y dejamos un par de minutos más para que se dore un poco y no quede tan paliducho. Para darle la vuelta me ayudo con la bandeja de vapor.

Para hacer el glaseado añadiremos al azúcar glass y el zumo de limón hasta que adquiera la textura deseada, vamos que pueda escurrir bien sobre el bizcocho. La verdad que lo hago un poco a ojo , pero suelo partir de unos 150g de azúcar.

Dejamos enfriar y cubrimos con el glaseado.

Antes de que se solidificase el glaseado, le añadí coco rallado.


Cake pops de galleta y queso

miércoles, 18 de marzo de 2015

Si aún no tenéis regalo para el día del padre tengo vuestra solución, podeis preparar con ayuda de los peques de la casa unos deliciosos cake pops que son ideales para sorprender a alguien especial. Estos los hice para regalárselos al novio de una amiga que habían operado de una rodilla y le gustaron mucho.

Los cake pops son unos dulces bocados que gustan tanto a niños como no tan niños.Se pueden preparar con restos de bizcochos,  con magdalenas, con galletas..admiten un sinfín de posibilidades.Los de la receta de hoy son de queso tipo philadelphia y galleta, una auténtica delicia.

 

Nos ponemos delantales y ¡ a cocinar!

Ingredientes (para cinco unidades)

90 g galletas tipo digestive
45 g queso tipo philadelphia
110g de chocolate de cobertura.

Preparación

Trituramos las galletas dentro de la bolsa tipo zip con ayuda de un rodillo hasta conseguir  harina de galleta.

En un cuenco mezclamos la harina de galleta con el queso hasta conseguir una masa bien integrada.

Hacemos bolitas con la mano o con una cucharada de helado para que queden de tamaño similar.

 

Fundimos un poco de chocolate en el microondas, introducimos el extremo del palo y pinchamos las bolas. No los pinchéis demasiado, si lo hacéis, corréis el riesgo de que la bola sea atravesada por completo.

Metemos en el congelador unos veinte minutos hasta que solidifique el chocolate y el palo este bien pegado.

Fundimos el chocolate en el microondas, dejamos que se temple y vamos metiendo cada uno de nuestros cake pops en el chocolate de manera que queden bien bañados. El exceso de chocolate  lo eliminamos dando unos golpecitos suaves sobre la mano con el cake pop hacia abajo.

Decoramos al gusto antes que solidifique el chocolate y los pinchamos en un polispan para que no se arruinen durante el secado. Yo los meto en nevera para que  solidifiquen antes.

Espero que os gusten.
 





 

Pastas de queso Stichelton y nueces

lunes, 16 de marzo de 2015

Estoy a siete días de salir de cuentas y Daniela no da señales de querer salir de su spa particular. Me encuentro bastante pesada, torpe y despistada. Estoy bastante harta de no verme los pies, así que a ver si se decide en esta semana y no se retrasa mucho. A pesar de estar cansada las ganas de cocinar no cesan, me apetece estar todo el día cocinando y horneando deliciosos dulces, aunque yo ni los pueda probar porque me sientan como una patada en el hígado :-).

La semana pasada preparé unas deliciosas pastas de queso Stichelton y nueces., aprovechando un pedacito que nos habían regalado. No os asustéis por ese nombre, que las podréis hacer con cualquier queso azul que se precie, ya que se asemejaría a ese tipo de queso. El queso Stichelton es un queso inglés (si queréis más información ver aquí), con un sabor muy fuerte e igual de delicioso que de caro (+ de 30 € el kg..). Si tuviera que buscarle un parecido, se asemejaría mucho al Stilton, también inglés, pero que es más fácil de encontrar en tiendas (ver la receta que hicimos con ese queso aquí).  La receta es del libro "pasteles,pastas, galletas,merengues,tartas,panes dulces y salados" y espero que os guste.


Ingredientes

120 g de queso Stichelton u otro queso azul.
50 g de mantequilla ablandada.
125 g de harina tamizada.
60 g de nueces picadas.
Pimienta negra recién molida.
1 yema de huevo

Cortapastas circular.

Preparación

Mezclamos el queso y la mantequilla con la batidora eléctrica, hasta formar una crema. Añadimos la harina a la mezcla de queso y frotamos con los dedos para formar migas. Una vez tengamos esas migas, agregamos las nueces y la pimienta negra y mezclamos bien. Por último, añadimos la yema y mezclamos hasta formar una masa firme.

Amasamos un poco sobre una superficie enharinada para agregar bien las nueces. Envolvemos la masa en plástico. Refrigeramos una hora. Precalentamos el horno a 180 ºC.

Una vez pasada la hora de reposo, quitamos el film y llevamos la masa a una superficie enharinada y amasamos brevemente para ablandarla.

Extendemos la masa a un grosor aproximado de 5 mm y cortamos la pasta con un cortador. También podemos optar por hacer un rollo de masa de 5 cm de diámetro y refrigerarlo. Si fuera así, con un cuchillo afilado cortaríamos el rollo de masa en rodajas de 5 mm.

Horneamos las pastas en bandejas de hornear antiadherentes, 15 minutos en lo alto del horno. Damos la vuelta a las pastas y horneamos otros 5 minutos, hasta que estén doradas por ambos lados.

Tarta terciopelo rojo (red velvet cake)

miércoles, 11 de marzo de 2015

La tarta red velvet o terciopelo rojo fue la primera tarta que hice para el primer cumpleaños que celebramos en nuestra casa nueva. Me trajo de cabeza su elaboración, porque para no haber hecho una tarta nunca debería haber elegido una más facilita, pero por Ismael me armé de valor y con ayuda de mi madre conseguimos que nos quedará buenísima. Y fue entonces cuando me enamoré de la red velvet por su delicioso sabor indescriptible y por su rica cobertura. Hasta hace bien poco he tenido publicadas en el blog las foto de la primera tarta que hice, pero eran unas fotos bastante malas, así que para este "San Valentín" la hice de nuevo y me volvió a enamorar.

En esta ocasión se me estropeó la batidora amasadora cuando estaba elaborando la buttercream, así que tuve que terminarla a mano y no pude hacer más cantidad para poder hacer una decoración más bonita, ni hacer un relleno más grueso, pero bueno, al final quedó bastante bien y de sabor un 10.  Como no tenía moldes de layer cake, he usado tres moldes desechables de aluminio del Mercadona de 18 cm que si los tratas bien los puedes reutilizar. Los bizcochos es conveniente hacerlos el día de antes para que se asiente más el sabor. La receta es de Alma Obregón tomada prestada del blog "la cocina de Morilands" y a pesar de que te dice que tienes que preparar dos porciones de crema yo sólo puede preparar una ante el fallecimiento imprevisto de mi batidora-amasadora y el resultado es también bueno.

Ahora vamos con su historia:

La tarta terciopelo rojo o red velvet es un dulce típico del sur de Estados Unidos que se puede encontrar en casi todas las buenas pastelerías del país. Este pastel llama la atención por su intenso color rojo.

En sus inicios se conseguía por la oxidación producida por la interacción de sus ingredientes, pero durante la escasez de la II Guerra Mundial, los cocineros empezaron a añadirle colorantes. El hotel Waldorf Astoria de Nueva York la servía como una de sus exquisiteces. Cuenta la leyenda que una clienta quedó extasiada con el pastel y pidió la receta. Semanas después le llegó una carta con la receta acompañada de una factura de 300 dólares por revelar el secreto. Entonces la señora decidió amortizar la inversión revelando la receta a todas las personas que pudo, y que de ahí surgió su popularización. Quizás gracias a esa dama anónima ahora puedo revelarte el secreto de este delicioso pastel.

No hemos tenido la suerte de estar en NY para probarla en el hotel Waldorf Astoria, pero en nuestro periplo por la costa Oeste pudimos dar buena cuenta de este manjar en una preciosa tienda del pueblo de Carmel (cerca de San Francisco, que como curiosidad tuvo de alcalde a Clint Eastwood), llamada Cottage of sweets. Allí la comimos en una especie de minitarta-caramelo, un híbrido bastante extraño pero muy bueno, que nos dio pie a conocer esta exquisitez, aunque no fuera en su forma más común.

Cottage of sweets, en Carmel, un paraíso de las chucherías
Y ahora sí, nos ponemos delantales y ¡ a cocinar!

Ingredientes

Para el bizcocho:
120 ml de aceite de oliva suave.Yo usé de girasol.
320 gr de azúcar.
2 huevos.
2 cucharadas rasas de cacao sin azúcar.
1 cucharadita de colorante rojo en pasta.
3 cucharaditas de extracto de vainilla.
250 ml de leche.
2 cucharaditas de zumo de limón.
300 gr de harina.
1 cucharadita de bicarbonato de soda.
2 cucharaditas de vinagre blanco.

Para la crema de relleno y cobertura ( preparar dos porciones):
125 gr de mantequilla a tª ambiente.
300 gr de azúcar glas.
125 gr de queso crema (no light).
3 cucharadas de leche.

Preparación

Preparación del bizcocho:
En primer lugar preparamos el buttermilk , para ello ponemos la leche en un vaso y añadimos el zumo de limón. Dejamos reposar 8 minutos. No os preocupéis si la leche parece que se corta es como tiene que quedar.

Engrasamos y enharinamos los moldes.

Precalentamos el horno a 180ºC calor arriba y abajo.

Tamizamos la harina con el cacao en polvo. Reservamos.
 
Batimos el aceite, azúcar y huevos hasta que estén bien integrados. A velocidad baja, continuamos batiendo y vamos añadiendo la mezcla de harina con cacao alternándola con la leche.

Mezclamos en un vasito el bicarbonato de soda con el vinagre y cuando burbujee lo incorporamos a la mezcla. Batimos a velocidad baja hasta que la mezcla sea homogénea.

Agregamos ahora el colorante rojo y el extracto de vainilla y continuamos  batiendo para integrarlo todo bien.

Repartimos la mezcla en los tres moldes de manera que haya la misma cantidad en cada uno de ellos (yo pesé la masa)

Introducimos en el horno durante 30 minutos aproximadamente hasta comprobar que están bien cocidos pinchando con un palillo o cuando compruebes que se han separado del molde por los laterales.

Una vez templados, desmoldamos sobre una rejilla y dejamos enfriar por completo.

Envolvemos en film y metemos en la nevera hasta el día siguiente.

Preparación de la crema:
Tamizamos  el azúcar glas en un bol grande y vierte sobre éste la mantequilla que deberá estar a temperatura ambiente. Batimos  a velocidad máxima hasta que se integre bien la mezcla.

Vamos  incorporando la leche conforme está batiéndose. Cuando la mezcla esté blanca y esponjosa, añadimos el queso de una vez. Batimos  primero a velocidad baja durante 1 minuto aproximadamente y a continuación subimos  la velocidad al máximo y continuamos  batiendo hasta conseguir una crema con consistencia. 

Montaje de la tarta:
Igualamos los bizcochos con un cuchillo afilado  y fijamos uno de ellos con un poco de crema sobre la base que vayamos a montar la tarta, vamos rellenando y poniendo un bizcocho sobre otro.

Cubrimos nuestra tarta con una capa de crema " la capa recoge migas" que ha de ser finita y metemos en la nevera 30 minutos.

Volvemos a cubrir con una nueva capa de relleno alisando bien con ayuda de una espátula y decoramos al gusto. Yo lo decoré con migas de bizcocho.

La tarta está mejor al día siguiente. Espero que os guste.

Patatas con costillas en olla a presión

lunes, 9 de marzo de 2015

Es un engorro tener que preparar la comida pensando si es "apta" o no para llevar al día siguiente en tapper. Como sucede con  las patatas con costillas que hoy os muestro "no son aptas" porque se quedan zapateras y desmerece mucho el plato. Así que este tipo de comida la suelo hacer el fin de semana para comerla recién hecha, lo que si hago es echar más costillas y setas y por arte de magia se convierte en una comida apta para tupper, eso si ya dejan de ser patatas y pasan a ser costillas con setas :-) , hay que ser mujer de recursos.


La receta es de mi madre, mi gran maestra, así que por narices tienen que estar buenísimas. Y la receta es en olla a presión de las de toda la vida , no es olla express ni rápida que no es lo mismo.

Nos ponemos delantales y ¡a cocinar!

Ingredientes ( para tres personas o dos con mucha hambre)

500g de costillas de cerdo
1/2 cebolla grande.
1/2 pimiento rojo.
1/2 pimiento verde.
4 dientes de ajos.
Pimentón de la Vera dulce "Las hermanas"
Pimienta negra.
Vino blanco.
Dos puñados de setas (opcional). Las mías las compro congeladas y son variadas, las he usado del Lidl y del Dia.
3 patatas grandes.
1 zanahoria.
1 pastilla de avecrem pollo.

Preparación

Echamos un chorro de aceite en la olla y sofreímos  la cebolla, el pimiento verde, el pimiento rojo, los dientes de ajos, todo junto y bien troceado.Salamos, dejamos unos minutos y añadimos el pimentón al gusto. Movemos bien para que no se queme el pimentón y añadimos las costillas previamente saladas. Las dejamos hasta que pierdan el color rosado,añadimos pimienta negra y un chorro de vino blanco.

Cuando el vino da un hervor añadimos agua suficiente para cubrir las costillas al ras. Tapamos la olla, la ponemos a fuego fuerte y cuando haya cogido presión bajamos a fuego medio y dejamos cocer durante 20 minutos más o menos ( hasta que estén tiernas).

Abrimos la olla, añadimos las setas congeladas, la zanahoria, las patatas troceadas y la pastilla de avecrem desmenuzada. Tapamos la olla, la ponemos a fuego fuerte y cuando haya cogido presión bajamos a fuego medio y dejamos cocer durante 25 minutos. Rectificamos de sal si fuera necesario.

Espero que os guste.







Sobaos pasiegos

martes, 3 de marzo de 2015

Hola a tod@s,

El año pasado estuvimos unos días de escapada por Cantabria y entre otros deliciosos dulces probé los sobaos pasiegos. Los había comido en muchas ocasiones y no eran santo de mi devoción pero he de decir que los de allí me cautivaron. Con cada bocado un intenso sabor a mantequilla inunda tu paladar ¡mmmmm...! se me hace la boca agua solo de pensarlo. Aparte de su gastronomía, vinimos encantados con sus preciosos paisajes.


Ese sabor y textura se nos quedaron grabados, así que los sabaos se convirtieron en una de mis recetas pendientes. Aunque sabía que no me iban a saber igual que los que comí en Cantabria, busqué por internet a ver si encontraba una receta que me convenciera y encontré la del  blog "Manzana y canela", una auténtica cántabra que mostraba en su blog la receta del libro Cocina Cántabra, de Concepción Herrera de Bascuñán, así que me decanté por la suya.

Los moldes los podéis comprar en tiendas de repostería o los podéis hacer vosotros mismo con papel encerado que venden en las papelerías. En el mismo blog "Manzana y canela" viene muy bien explicado como hacerlos a mano. Yo los hice a mano, bueno, en realidad yo los dibujaba y cortaba y mi madre los montaba y una vez más me dí cuenta de lo pésima que soy para las manualidades.... Recordé mi infancia cuando mi madre me terminaba haciendo los trabajos manuales ante mi inutilidad de manos... ;-).

Quiero aclarar antes de nada, que lo mejor es hacer la masa a mano de forma tradicional sin utilizar artilugios eléctricos, pero como me gustaron como le habían salido a Montes con la batidora de varillas, decidí usarla y el resultado espectacular.

Bueno, vamos a lo que vamos. Nos ponemos delantales y ¡ a cocinar!


Ingredientes (para 9 unidades)

250 gr. de harina.
250 gr. de mantequilla sin sal, derretida y atemperada. Importante usar una mantequilla de buena calidad, yo usé Imperial.
250 gr. de azúcar.
3 huevos L.
1 cucharada de ron o coñac.
1 pellizco de sal.
Ralladura de un limón.
3 cucharaditas de levadura en polvo.

Preparación

Precalentamos el horno a 190º, calor arriba y abajo sin ventilador.

Ponemos nuestros moldes ya hechos sobre una bandeja de horno. NO hay que engrasarlos.

Derretimos la mantequilla al microondas, con cuidado de que no hierva. Dejamos atemperar.

Tamizamos la harina junto con la levadura. Reservamos.

En el bol de la batidora ponemos los huevos, ligeramente batidos, el azúcar, el licor, la ralladura de limón, la sal y la mantequilla, y lo batimos todo hasta conseguir una crema homogénea.

Incorporamos la harina y la levadura, y mezclamos suavemente con una espátula, removiendo bien hasta que esté todo bien integrado.

Repartimos la masa en los moldes y los alisamos con la espátula.

Horneamos unos 15 minutos, hasta que veamos que comienzan a dorarse. No hay que dejarlos mucho en el horno o se resecarán.

Una vez hechos, sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.

De paseo por Santillana del Mar (el pueblo de las 3 mentiras, no es santa, ni llana, ni tiene mar)
Los originales nombres de algunos dulces cántabros